sábado, 30 de enero de 2010

Estimulación unisensorial y/o multisensorial; en el Jardín Maternal. Experiencia sensoperceptiva

La vida de los maternales transcurre en un mundo guiado más por las sensaciones y percepciones.
La estimulación unisensorial busca generar una experiencia en un sentido a la vez.
La estimulación multisensorial trabaja varios sentidos al mismo tiempo.
Al nacer los sentidos y la capacidad perceptiva se encuentran bastante desarrollados, listos para captar y responder a los estímulos. A las pocas horas de nacido, el neonato reconoce a su madre mediante el olfato, la visión y la audición. Sin embargo estas funciones deberán aún desarrollarse con base en las experiencias y la maduración biológica.

El aparato sensorial y perceptivo

La integración sensorial es la función que cumple el Sistema Nervioso al procesar todo lo que captan nuestros órganos sensoriales.
En cada uno de nuestros pequeños actos que realizamos a diario, cuando nos movemos, hablamos, nos relacionamos con los demás…existe una perfecta coordinación en la información que entra en el Sistema Nervioso a través de los sentidos y la que sale, en forma de nuestro comportamiento y nuestra actitud.
Poseemos 6 sistemas sensoriales con los que conocemos y nos relacionamos con nosotros mismos y con el mundo que nos rodea: tacto, gusto, olfato, vista y propiocepcion*sentido que informa de una parte móvil del cuerpo, digamos la mano, con respecto a otra de posición fija, como el tronco.

Tres aspectos interesantes con respecto a los sistemas sensoriales:

  1.  Los sentidos trabajan de manera integrada para ofrecernos información del medio. Esta integración ocurre especialmente durante los primeros años de vida, decreciendo con el paso del tiempo, en razón de que la intensidad sensorial no es valorada en nuestra cultura y sistema educativo. Es una pena que los currículos descuiden casi por completo este importante aspecto del desarrollo que no solo es un medio para conocer el medio ambiente, sino también una importante forma de conocernos a nosotros mismos.
  2.  Durante los primeros años de vida los sentidos son la primera fuente de conocimiento. Al nacimiento no existe el pensamiento simbólico ni el razonamiento lógico, solo el mundo sensorial y perceptivo. De ahí que es muy importante que los estímulos sean variados y gratificantes.
  3. Los humanos mostramos diferencias en nuestros patrones sensoriales y en nuestra capacidad para aprender a través de uno u otro sentido, por ejemplo, unos lo hacen mejor con la audición y otros con la visión.

Experiencia sensoperceptiva

¡Con agüita y arena!

Antes de empezar…
El agua y la arena son elementos que ejercen irresistible atracción en los niños, pero raramente son utilizadas por los docentes debido a las complicaciones que se presentan en su uso cotidiano, recurriéndose solo a ellos como elementos auxiliares.
Ante la perspectiva de su uso vemos aparecer temor al desorden, al descontrol del grupo. Y mucha resistencia, tanto de los docentes como del grupo familiar, a que los niños se mojen o ensucien.
Si incorporamos el juego con agua y arena gradualmente, podremos lograr un cambio, perderle el medio, a la vez les ofertemos a nuestros alumnos la posibilidad de canalizar sus intereses y necesidades.


Con todos los sentidos...


El juego con agua y arena estimula  a los sentidos de los niños, influyen en forma positiva en su estado emocional y les permite desplegar diferentes habilidades.
Los niños de aproximadamente 10 meses en adelante comienzan a sentir gran atracción por explorar los elementos del mundo que les rodea, entre ellos se encuentra el agua y la arena.
 Este juego es una actividad libre… no tiene una forma correcta o equivocada de hacerse por lo que fomenta el desarrollo de un proceso sin enfatizar en el producto o resultado final.
Con estos elementos se pueden crear las formas de juegos más sencillas, creativas y divertidas, aparte que conllevan muchos beneficios como:

 Motivan a explorar y resolver problemas.

 Fomentan el crecimiento en todas las áreas del desarrollo.

 Construyen destrezas socio-emocionales al interactuar con otros niños durante el juego.

 Fortalecen el desarrollo del lenguaje y aumento en las destrezas del vocabulario.

 Contribuyen al desarrollo motor.

 Permiten la expresión creativa de los niños y los motiva a planear y a ejecutar el plan de la forma que ellos quieran.

Aprenden cuestiones básicas de causa y efecto .

 Tienen un efecto tranquilizador sobre los niños que se agitan fácilmente.


 Selección de elementos y juguetes 

Bandejas de plástico, pelotas, pedacitos de madera botellas rociadoras, rastrillos, tazas, baldes, cucharones, cucharas, palitas, pequeños moldes, bañeras para muñecos, tubos transparente, objetos que floten o se hundan, barquitos de papel, caracoles, esponjas, una manta o toallas viejas para cubrir el área de juego…

¡Comencemos a jugar junto a los pequeños!!

 Los docentes debemos participar conjuntamente con nuestros alumnos en estas experiencias, de esta forma podremos ir señalándoles las propiedades de los objetos y la forma de jugar con ellos.


Posibles actividades


  •  Utilizar música de diferentes estilos para alentar el juego activo o calmado.
  • Descubrir la temperatura del agua, las gotas, comprobar que cosas flotan y cuales no, llenar vaciar, hacer trasvasar de un recipiente a otro…
  • Agregar colorante vegetal comestible para que resulte mas fácil o preparar contenedores pequeños llenos con agua de distintos colores. Permitir que los niños agreguen el colorante con ayuda de goteros.
  • Para una diversión mayor, agregar líquido para baño de espuma o para lavavajillas y jueguen con un batidor de alambre o plástico.
  • Jugamos a lavar objetos, se presentara una palangana o balde (o varios) y esponjas. La propuesta puede ser:”Lavamos estas cosas?”.
  • Preparar pompas de jabón, con alambre podemos fabricar un aro. Sumergimos en agua y soplamos. ¿Qué ocurre? Le agregamos detergente. ¿Y ahora? Soplamos despacito. Comprobamos la cantidad de detergente que debemos agregarle. Nos subimos a una silla, soplamos y hacemos burbujitas y las hacemos chocar. Tratamos de pincharlas. ¿Qué pasa cuando chocan o explotan en el piso? Soplamos a favor del viento, en contra de ‘el. Le agregamos pintura y jugamos al aire libre.
  •  Hacer cascadas con difentes envases, una palangana y barquitos de papel. Colocar los envases de tal manera que, sosteniendolos, la base del primero quede sobre la superficie del otro y asi sucesivamente hasta colocar debajo de todo la palangana. Un nene ira volcando agua en el primer envase, que al llenarse dejara caer el agua en el segundo, repitiendose esto hasta el final. Luego podran otros nenes colocar barquitos para que vayan cayendo hasta la palangana.

 No conozco niño al que no le agrade jugar con agua, desde saltar en un charco hasta meter la mano en un recipiente, salpicar, mojarse la cabeza… Idealmente los pequeños del jardín, deberían tener la oportunidad de usar arena y agua en forma diaria.

 La experiencia propuesta no es solamente divertida sino que se convierte en un aprendizaje.



¡GLU GLU GLU! ¡GLUGLÚ!